Nosotros no te podemos asegurar que una oposición sea fácil. Se cataloga a muchas como oposiciones fáciles, pero los aspirantes no están de acuerdo con esta predicción. Todo dependerá de ti, de tus circunstancias y tu ímpetu.

Eso sí, ten en cuenta que el empleo público es una garantía de estabilidad laboral.

Por ello, es importante que conozcas toda la oferta de oposiciones, y tengas claro que al aprobarla, ese será tu trabajo para toda la vida.

Antes de presentarte a una oposición debes conocer dos puntos clave:

Requisitos

Dependiendo de la oposición a la que te presentes deberás cumplir una serie de requisitos u otros.

Por ejemplo, para acceder a oposiciones del grupo A, necesitarás tener una titulación universitaria o un doctorado. En cambio, para las del grupo C2, únicamente tendrás que tener terminada la secundaria.

Además, dependiendo del cuerpo al que accedas necesitarás tener nacionalidad española o te servirá con el permiso de residencia.

Por otro lado, también se limita la edad de acceso, dependiendo de la oposición.

El temario determina las oposiciones fáciles

Debes tener muy en cuenta el volumen de temario de la oposición. Encontrarás algunas que cuenten con temarios muy amplios. Otras, en cambio, serán únicamente 12 o 13 temas.

A menor volumen, más fácil te resultará prepararla.

Recurrencia

Al hablar de recurrencia, nos referimos a la frecuencia con la que se convocan los procesos selectivos.

Presentarte a una oposición con convocatorias muy espaciadas en el tiempo, será mucho más difícil de conseguir. Ya que en caso de suspenso, tendrás que volver a esperar muchos años para presentarte de nuevo.

Cantidad de plazas por opositor

Podríamos decir que las oposiciones fáciles son aquellas de menor categoría. Ya que tienen menor temario y sus requisitos son menos exigentes. Pero también son a las que más aspirantes se presentan.

A la hora de escoger una oposición, debes tener en cuenta el proceso selectivo y el número de personas que se suelen presentar a este. Así conocerás si la competencia es mucha o no.

Auxiliar Administrativo del Estado: las oposiciones fáciles

Es considerada una de las oposiciones fáciles de aprobar. Debido a que no necesitas cumplir requisitos exigentes para presentarte, el temario es relativamente corto y las convocatorias de nuevas plazas son frecuentes.

Si quieres ser auxiliar administrativo del estado te encargarás de realizar todo tipo de tareas burocráticas y administrativas.

Actualmente quedan por convocar 1.012 plazas para este cuerpo. Por ello, si tienes el título de la ESO y quieres ganar más de 19.000€ brutos anuales, esta es una de las oposiciones fáciles que puedes aprobar.

Auxilio Judicial: una oposición “ligerita”

Esta oposición es el proceso selectivo más sencillo de la Administración de Justicia.

Al igual que para los auxiliares administrativos, únicamente necesitarás el graduado en secundaria. Pero a diferencia de ese cuerpo, tendrás que tener la nacionalidad española para poder presentarte.

Además, la convocatoria de plazas de empleo en las oposiciones de auxilio judicial suele ser anual y numerosa. Actualmente quedan por convocar 1.257 plazas.

Si optas por este cuerpo, te encargarás de apoyar de manera directa a los cuerpos de gestión y tramitación procesal. 

No tendrás que estudiar un temario extenso, ya que solo consta de 26 temas. Y en el examen te enfrentarás únicamente a 100 preguntas tipo test.

Administrativo del Estado: un reto para quien busca oposiciones fáciles

A pesar de que en estas oposiciones se requiere un nivel de formación mayor, (bachillerato) son oposiciones fáciles.

La facilidad de estas oposiciones reside en el ratio de plazas por aspirante. En la última convocatoria, el número de plazas a cubrir creció a 2.029.

Si te decantas por el cuerpo de Administrativos del Estado, tendrás que estudiar un temario de 38 temas, divididos en 5 bloques. A primera vista el número parece alto, pero recuerda que existen oposiciones con 200 temas.

Además, una vez conseguida tu plaza tendrás un sueldo mínimo de 24.000€ brutos anuales.