Seguridad laboral

Una de las principales razones por las que resulta muy interesante opositar es por la seguridad laboral que ofrece. El hecho de poder conseguir un puesto de trabajo fijo para toda la vida es algo muy complicado de encontrar en el sector privado, donde siempre se podrá estar a merced de las decisiones de las empresas.

Cuando hay momentos de crisis, las empresas privadas destruyen miles de empleos, mientras que los funcionarios pueden disfrutar de una estabilidad laboral muy deseada por cualquier trabajador. Esto se traduce en menos estrés, nerviosismo y ansiedad por la incertidumbre de su futuro laboral.

Opositar a mejores condiciones laborales

Con un empleo público se puede disfrutar de mejores condiciones laborales. Entre ellas se encuentran:

• Horario fijo y continuado, con una hora fija de entrada y salida. Esto contribuye a la hora de lograr que los trabajadores estén más motivados y puedan planificar mejor su tiempo libre.
• Días de asuntos personales. Son días, aparte de los de vacaciones, que los empleados tienen disponibles para su uso y disfrute.
• Jornadas laborales inferiores a las 40 horas semanales. La media se encuentra en unas 37,5 horas a la semana.
• Menor estrés y más libertad, sufriendo una menor presión que en el sector privado.
• Solo te despedirán en el caso de que hayas hecho una acción muy grave, como agredir a otra persona. En caso contrario, será complicado o prácticamente imposible que no mantengas tu puesto de trabajo.
• Dispondrás de movilidad geográfica, lo que te ayudará a estar lo más cerca posible de tu lugar de residencia.

Mayor remuneración

Opositar te permitirá acceder a un puesto de trabajo público en el que los salarios medios son más elevados que en la empresa privada para unos niveles de formación similares. Asimismo, tienes que tener en cuenta que dispones de retribuciones básicas, complementarias y las pagas extraordinarias. De esta forma, también podrás tener una mayor capacidad económica gracias a tu trabajo en el sector público.

Conciliación laboral y familiar

Uno de los motivos más importantes para decidirte a opositar son las ventajas de las cuales puedes disfrutar a nivel personal una vez que has llegado a un puesto de trabajo como funcionario.

El Estado ofrece una mayor flexibilidad a la hora de conciliar tu vida laboral con la familiar. Además de disponer de una jornada intensiva, dispondrás de diferentes mecanismos de conciliación que no son tan viables en la empresa privada. Entre otros se encuentran:

• Permisos retribuidos y no retribuidos.
• Reducciones de jornada.
• Posibilidad de disfrutar de excedencias laborales.
• Etcétera.

Además, hay que destacar que podrás disfrutar de una mejor calidad de vida familiar, pudiendo pedir permiso de unos días, reducir jornada…

Promoción interna

Entre las mayores bondades que nos ofrece el sector público es que evitarás sufrir la frustración de no poder seguir avanzando a nivel profesional. Opositar te ayudará a la hora de lograr evolucionar laboralmente. Ya que, una vez que tengas una plaza, si cumples con los requisitos, siempre tendrás la posibilidad de aspirar a una categoría superior. Logrando así crecer internamente. De esta forma, también podrás mejorar tus condiciones laborales.

Son muchos los que deciden empezar por una oposición más sencilla para, posteriormente, ir progresivamente ascendiendo, aprobando nuevas oposiciones y logrando una mejora de las condiciones laborales.

Mayor Oferta Pública de Empleo

Más allá de todos los motivos mencionados con anterioridad, hay una gran razón para opositar actualmente; y es que en los últimos años no ha dejado de crecer la Oferta Pública de Empleo, contando con más de 30.000 vacantes. 

Asimismo, teniendo en cuenta la edad media de los trabajadores del sector público es de 52 años, esto hace que se estimen muchas reposiciones de plazas para los próximos años. De esta manera, nos encontramos en un momento en el que las oposiciones son una de las mejores opciones a nivel laboral, pudiendo asegurar así un futuro empleo.

Exceso de personal interino

En la línea del motivo anterior, se debe conocer que España es uno de los países que dispone de una mayor cantidad de funcionarios sin plaza fijo. En torno a un 30% de los empleados públicos son interinos.

Esta situación ha provocado que el Gobierno se vea obligado a incorporar al número de plazas de las oposiciones aquellas que estaban siendo cubiertas por personal interino. De esta manera, a lo largo de los próximos años seguirá creciendo el número de plazas de convocatoria para oposiciones.

Dicho todo lo anterior, como puedes ver, existen muchas razones para opositar, siendo actualmente el mejor momento para ello.

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